Osobuco a la Milanesa. Menuda receta la de hoy, un Osobuco a la Milanesa super fácil de preparar y que está rico rico rico.
Pero antes de entrar en materia quizás no sepas que es un osobuco así que primero lo primero 😉
El osobuco es un corte transversal (una rodaja) del jarrete de ternera manteniendo el hueso (fíjate en la foto). Su nombre viene del italiano Ossobuco u Osso buco que significa hueso con hueco (ese hueco es donde está el tuétano) y es un plato tradicional de Italia, sobre todo en Milán.
No es demasiado frecuente encontrar este corte de carne pero cualquier carnicero te lo puede preparar si lo avisas con antelación, solo tienes que decirle que te corte un jarrete en rodajas de entre 2 y 3 dedos de grosor (entre 4 y 5 centímetros) y listo.
Quitando esto, todos los demás ingredientes son muy fáciles de encontrar (apio, zanahorias, cebolla,….) y como además vamos a hacer el osobuco al horno resulta super fácil de preparar y el resultado prometo que es espectacular, super tierno y riquísimo!!
Por cierto, lo puedes acompañar con un risotto a la milanesa, polenta o simplemente con patatas fritas y tendrás el éxito asegurado!!
¿Te animas con la receta? Pues ya sabes … a la cocina!!
COMO HACER OSOBUCO A LA MILANESA
INGREDIENTES para 4 PERSONAS:
- 4 osobucos de ternera (rodajas de jarrete con hueso)
- 200 gramos de tomate triturado (puede ser natural rallado o de lata)
- 1 cebolla grande (unos 200-250 gramos)
- 2 zanahorias
- 2 dientes de ajo
- 2 pencas de apio (si son grandes solo una, unos 50 gramos)
- 125 ml de vino blanco (medio vaso)
- 250 ml de caldo de carne o de pollo (un vaso)
- 2 cucharadas de harina de trigo (de la normal)
- 25 gramos de mantequilla
- 6 cucharadas de aceite de oliva
- sal
- pimienta negra molida
- romero seco
- 2 hojas de laurel
RECETA:
- Primero que nada vamos a preparar las verduras. Lava bien el apio y córtalo en trocitos muy pequeños. Haz lo mismo con la cebolla, la zanahoria y pica el ajo muy fino.
- Salpimenta los osobucos y luego pásalos por un plato con harina. Sacude para que suelte el exceso de harina y reserva.
- Coge una sartén grande y añade el aceite de oliva. Cuando esté caliente dora los osobucos por ambos lados (mejor hazlo por tandas). Coloca los osobucos en una cazuela o fuente apta para el horno y reserva.
- En la misma sartén donde hemos hecho los osobucos añadimos la mantequilla y las verduras que hemos picado. Añade también una pizca de romero seco (solo una pizca) y un par de hojas de laurel. Deja a fuego medio hasta que la cebolla se ponga bien blanda.
- Cuando esté lista la cebolla añade el tomate triturado y sube el fuego. Deja que el tomate pierda toda el agua y se sofría durante unos minutos.
- Cuando tengamos el tomate bien sofrito añadimos el vino blanco y dejamos que se reduzca un poco.
- Luego añade el caldo y mezcla bien. Es el momento de probar de sal y añadir hasta que esté a nuestro gusto, también le vine bien un poco de pimienta negra.
- Pon el horno a 200ºC con calor arriba y abajo (si es con ventilador ponlo a unos 180ºC).
- Cuando la mezcla de caldo y sofrito esté caliente añádela sobre los osobucos. Tapa con papel aluminio la cazuela o fuente y mete en el horno durante 2 horas.
- Puedes mirar cada 45-60 minutos a ver como va la cocción, por si tu horno es muy fuerte y el caldo se reduce muy pronto. Pero lo normal es que pasadas las 2 horas la carne esté tierna y todavía quede bastante caldo a su alrededor (ten en cuenta que la carne suelta bastante agua y al estar tapado se reduce poco). Lo mejor en este caso es sacar del horno la cazuela (ojo que achicharra!!!) y ponerla en el fuego hasta que reduzca y se forme una salsa espesa (fíjate en la foto). Si la cazuela o fuente no es apta para poner al fuego o la vitro puedes dejar la carne más tiempo en el horno hasta que se reduzca algo la salsa. Y listo … fuera de la cocina y a comer!!!!
NOTAS:
- Si no tienes caldo puedes usar agua aunque en este caso la salsa perderá una pizca de sabor.
- Es importante meter el osobuco en el horno con el caldo caliente, si no es así el caldo tardará en calentarse bastante y la cocción puede alargarse a las tres horas.
- Si no quieres hacerla en el horno puedes dejar la carne en una cazuela al fuego bien tapada. En este caso añade el doble de carne y vigila que no se quede seca hasta que esté blanda. En ese momento podrás destapar y reducir bien la salsa.
- IMPORTANTE: si las rodajas son muy pequeñas (las más cercanas a la pezuña son las más finas) puede que tengas que añadir alguna rodaja extra.
Como comenté antes puedes elegir entre distintos tipos de guarniciones pero a mi sin duda la que más me gusta es la Polenta, que es como un puré de patata pero con harina de maíz y queda riquísimo cuando le echas por encima la salsa del osobuco.
También le va bien como acompañamiento un poco de arroz, en especial un risotto. Eso sí, como la salsa tiene tanto sabor no merece la pena complicarse elaborando un risotto de setas por ejemplo, ya que se taparían los sabores entre si. Es mejor elaborar un risotto sencillo y según cuenta Antonio Carlucicio en su libro «Dos Italianos entre Fogones», el que mejor le va es el Risotto a la Milanesa, que no es otra cosa que un risotto básico (mantequilla, caldo, vino blanco y parmesano) al que se le añade un poco de azafrán para darle color y sabor. Es muy sencillo, pero viene de perlas para acompañar con este osobuco en salsa.
Por supuesto también puedes poner un poco de arroz blanco hervido que aunque no se acerca al Risotto a la Milanesa es una alternativa más sana y rápida de hacer si vas justo de tiempo.
Y si quieres tirar por lo más fácil prepara unas patatas, fritas o al horno y listo!!
Por cierto, es muy habitual finalizar este osobuco en salsa con una Gremolata o Gremolada que es una picada de perejil, ajo, ralladura de naranja y/o ralladura de limón. Es una forma de añadirle más sabor al plato pero cuando un plato queda tan rico como este no veo necesario añadir nada más y yo en casa no se lo pongo. Además, si lo van a comer en casa los niños puede que noten la gremolata y no les guste tanto.
Una última cosa, lo del interior del hueso se puede comer, es el tuétano y para muchos es un plato exquisito. Yo soy de gustos menos refinados y prefiero comerme solo lo que rodea al hueso 🙂
Y eso es todo por hoy. Si preparas la receta en casa no dejes de contarme que tal te quedó escribiéndome un comentario 😉
Un saludo cocina!!!
Javi sigue publicando recetas! Nos habías ilusionado con tu vuelta!
Que receta más rica.
Me encanta tu sitio. Esta todo bien explicado para poder repetir la recta sin problemas y me voy a poner con esta.
A ver si me queda tan rico ¡¡ Bueno, yo tengo carne de casa y eso es una ventaja. te dejo el contacto por si a alguien le interesa carneadomicilio.online